15.4.08

L u x u r y




Sí, sería fantástico poder gozar de plena consciencia al momento de volarte los sesos. Sentir el plomo surcando atropellado de lado a lado el marote. Decir "guau, que flash" y mirar con ojos de niño extasiado en su fantasía.

No por nada es el capricho más costoso de todos.