22.11.09

Descansa

Así será, nona.
Puramente recuerdo, y luego olvido.
Como todos, ya lo sabés.
Y si tus dudas más duras,
las que dieron fuego al dolor
hoy no proscribieron
al menos será ese silencio
perpetuo el que se lleve
la herida que no cerraste.

Al fin el fin,
el que acalló la mirada ida
que nunca perdió la trasparencia
y me dejó ver cómo duele
aún sin gritos, sin gestos.
Llegó el paseo tardío
para vos, que no viste el mar
pero sabías de su bravura.

¿Habrás vuelto al San Giorgio
anterior a la guerra y al progreso?
¿En cual de tus tierras
será este sueño?
¿Serás joven, o ya madre?
¿Serás la que teje o la que baila?
¿Que habrá en azules
reflejado por siempre?

Al fin, nona, la cárcel
será tierra y luego nada.
Al fín tus manos enormes
podrán olvidarse las llaves.
Al fin tus ojos serás preciosos
también en la lejanía.
Al fín te extraño.
De una buena vez lo logramos.